«Yo, Rin»: shōjo, drama y música electrónica en «Shelter» de Porter Robinson

 «Yo, Rin»: shōjo, drama y música electrónica en «Shelter» de Porter Robinson

El ser humano no es nada sin las tecnologías. El fuego, la ropa, la agricultura, la música, las estructuras y más recientemente los celulares y computadoras… Todas ellas son una ampliación de nuestro cuerpo, nuestra vida y experiencias, y el mismo principio sugiere el video musical Shelter.

Póster promocional del video musical Shelter

“Shelter”, canción de música electrónica lanzada el 2016, es una colaboración entre Madeon y Porter Robinson. Ese mismo año se estrenó su video musical, el cual era una colaboración entre Porter Robinson y A-1 Pictures. El video nos presenta a Rin, joven de 17 años que vive en una realidad virtual que puede construir y reconstruir gracias al uso de una tablet. Sin embargo, poco a poco unas memorias reprimidas irrumpen, cual bugs o errores de sistema, el mundo de la protagonista. Eso provoca que su entorno, en un primer momento colorido, se torne oscuro y hasta caótico -con elementos que no responden a nuestro “sentido común” de “naturaleza”-.

Esta realidad virtual que saldrá del control de Rin reactivará tanto su memoria como las del padre, las cuales estaban almacenadas en la nave espacial. En estos recuerdos se ve el esfuerzo del padre para construir una nave espacial que le permitiese a su hija sobrevivir en el espacio, ya que la Tierra sería destruida por la colisión con otro planeta. Él conectará a Rin a la máquina, tecnología que fungirá en adelante como una prótesis, es decir una prolongación del cuerpo de Rin, y de la memoria del padre. En este sentido, el video musical llama la atención por la importancia que le otorga a las tecnologías para la supervivencia del ser humano. Sin embargo, ante todo, no debemos olvidar que se trata de una canción de música electrónica, por lo que la canción en conjunto con su video musical reflexiona también (de manera implícita) sobre el uso de las tecnologías en la música. Por ello, veremos primero los antecedentes de la música electrónica, con especial ahínco en Japón.

Pero antes de leer el artículo, te invitamos a sufrir con nosotros y ver el video musical :’)  


Porter Robinson… WHYYYY!?!?!? *insertar llanto*

Antecedentes: Música electrónica en Japón

Thom Holmes, en su libro Electronic and experimental music realiza un exhaustivo análisis de la música electrónica, cuyos antecedentes yacen en un ámbito académico, específicamente en Europa (Francia y Alemania) y Estados Unidos. El uso de tecnologías que permitirán la experimentación en el ámbito musical no será de fácil acceso: muchas de estas herramientas eran obtenidas gracias al trabajo en universidad, o en ámbitos como la ingeniería, las telecomunicaciones y la electrónica. Asimismo, llegó a ser considerada una música academicista, que no llegaba a ser del gusto del general. Incluso llegó a ser catalogada de “inarmoniosa” -como fue calificada en su momento la musique concrète-, y criticada hoy en día por algunos como “repetitiva” y que “limita” al ser humano (1).


Ejemplo de musique concrète, por Pierrer Schaeffer. ¡Ciudado! Realmente puede salir de lo que canónicamente entendemos por «armonía» xP

El autor estudia también el desarrollo de la música electrónica en Japón hasta los años 70. Se trata de una música que une elementos de la música asiática con teorías de composición Occidental, con una primera aproximación a la música electrónica de Alemania y Francia. Los años 50 verán el surgimiento del Jikken Kobo (Taller Experimental), un colectivo de poetas, pintores y músicos que trabajarán en proyectos multimedia. Ellos colaborarán con la empresa Sony, quienes, luego de ver el tape composition que realizaban a partir de una de sus grabadoras, vieron una oportunidad de promocionar sus tecnologías a través de la música y proyecciones de arte que realizaban.

Ballet Mirai no Eve del grupo Jikken Kobo, vía Frieze

Asimismo, Holmes señala que en 1953 llegará la musique concrète, con Toshiro Mayuzumi, y en 1955 la elektronische Musik luego de la visita del compositor Makoto Moroi al estudio Nordwestdeutscher Rundfunk (NWDR) en Köln, Alemania. Moroi traerá de vuelta todo lo aprendido en Alemania y establecerá un estudio en la NHK -Nippon Hōsō  Kyōkai (NHK, Corporación de Radiodifusión Japonesa)-. Y si bien es gracias al Jikken Kobo/Sony y la NHK que el público japonés estuvo expuesto desde los años 50 a la música electrónica, será un género marginalizado hasta los años 1970. En ese año despega gracias a la Feria Mundial en Osaka, donde el gobierno apoyará a numerosos compositores para que se presenten en dicho evento.  

Hoy en día encontramos en Japón una producción diversa y numerosa de música electrónica: desde compositores y cantantes que pertenecen a conocidos sellos musicales como TeddyLoid, Mondo Grosso y Perfume; los que se mueven en un círculo underground como Goth-Trad; y quienes pertenecen a un medio de producción y difusión “alternativo” -los círculos dōjin y los espacios Comiket– como Shibayan Records y Alstroemeria Records.

Entonces, encontramos en este país un proceso de experimentación, popularización y difusión de la música electrónica no solo en círculos comerciales, sino también en espacios alternativos y de producción dōjin.


«Future Pop» de Perfume no solo es una canción dentro del electropop, sino también propone el uso de las tecnologías en su video musical.

The Anime Machine: las tecnologías en la animación japonesa

Un segundo elemento a tomar en cuenta para entender el surgimiento del video musical de Shelter es la reflexión inherente sobre el uso de tecnologías que tiene todo proceso de animación. Sobre el uso de las tecnologías en la animación japonesa, el libro The Anime Machine: A Media Theory of Animation de Thomas Lamarre es un referente. En su estudio expone dos elementos que permiten entenderla: la introducción y el impacto que tuvo el tren en Japón, y el uso de herramientas low-tech y la producción de bajo presupuesto.

El impacto del tren reside en cómo este permite a su usuario cambiar la percepción de lo que lo rodea. Se debe imaginar el cuerpo y la mirada -aparentemente inamovibles- como ejes centrales, y en una lógica donde existe la velocidad y el movimiento, los objetos externos son los que se mueven de manera secuencial. Si esta manera de percibir la secuencia de imágenes la aunamos al uso de la cámara multiplano y herramientas low-tech, tenemos lo que Lamarre llama animetism y efectos multiplano: un movimiento entre planos y superficies que permite la sensación de movimiento y profundidad.

Como el proceso de producción del anime implica inherentemente el uso de tecnologías -y explotar o innovar el uso que se le puede dar-, también invita a pensar en su uso y en la relación que el ser humano establece con estas: no solo permitirán al animador explorar el potencial de la imagen animada, sino también lo compromete a pensar en el uso de la misma tecnología, con nuevas formas de habitar y convivir en un mundo tecnologizado. De esta manera, el proceso de producción del anime, al igual que la música electrónica, nos invita a reflexionar sobre el uso de las tecnologías.

En ese sentido, pese a que el proceso de producción del video musical Shelter se sirve de las nuevas tecnologías para el desarrollo del corto animado, arrastra consigo las características inherentes del anime expuestas por Lamarre: la reflexión sobre el uso de las tecnologías.

Ok, ya tenemos las bases, ahora… Shelter! (?)

¡Chotto matte, joven-san! Antes sería bueno revisar la carrera musical de sus compositores (Madeon y Porter Robinson) y los vínculos que tienen con la cultura pop y las tecnologías, importantes para entender qué llevó a crear un corto animado como Shelter.

Porter Robinson, músico estadounidense nacido en 1992, se hizo conocido en los círculos en el 2010 con el sencillo “Say my Name”, el cual llegó a ser número uno en la plataforma Beatport. Asimismo, en esa misma época produce música que autodenomina dentro del género “complextro” (unión de los términos “complex” y “electro”). En 2012 comienza a hacer remixes oficiales de artistas como Avicii y Lady Gaga, y sacará “Language”, “complextro” con un inicio fuerte, que luego se torna melódico y profundo. En 2014 lanza su primer álbum titulado Worlds, con canciones como “Sea of Voices”, “Sad Machine”, “Lionhearted” y “Flicker”,las cuales presentan el interés del compositor por la cultura japonesa, los videojuegos, el anime y el programa Vocaloid, y evocarán una sensación de nostalgia.Por un año detendrá su producción musical, y en el 2016 lanza en colaboración con Madeon la canción “Shelter”, del cual se encargará, junto con A-1 Pictures de la elaboración de su video musical. Vemos entonces que, hasta el 2016, Robinson presenta una música que se caracteriza por un sonido profundo, introspectivo y nostálgico.

Porter Robinson, vía WololoSound

Por otro lado, Madeon es un compositor nacido en Nantes (Francia) en 1994. En el 2011 lanzó el sencillo “Pop culture”, un mashup de 39 de sus canciones favoritas. Su disco Adventure (2015), que en  su edición, deluxe incluye canciones como “Imperium”, “You’re On”, “Pay No Mind”, “Home”, “Icarus” y “Cut the Kid”, es un álbum que según el mismo Madeon: “busca capturar el sentimiento y sensibilidad de su adolescencia. Busca ser un álbum vibrante y pop, y que termine con un tono contemplativo”. En ese sentido, “Cut the Kid” y “Pay No Mind” tienen esa energía y onda pop de la cual habla el compositor; y “Home” y “Technicolor” un tono contemplativo. Para la promoción del álbum creó una aplicación llamada “Adventure Machine” que permitía mezclar fragmentos seleccionados del disco usando el celular, la tablet o la computadora. Esta herramienta sería nominada a los Webby Award, premio concedido a la excelencia en el desarrollo del Internet. Y en el 2016 y 2017 realizará una gira con Porter Robinson del sencillo “Shelter”. Hasta ese momento apreciamos, entonces, que la música de Madeon se caracteriza por un estilo enérgico, vibrante y con momentos contemplativos.


Did you feel the energy?

Por lo tanto, podemos apreciar a dos compositores de música electrónica que se sirven de la nueva tecnología y se inspiran muchas veces en ella para darle nuevos usos. Es sobre la base de esta relación y reflexión que los compositores tienen sobre la tecnología que surge la trama del corto animado. Y en este proceso, será vital la participación de Porter Robinson, cuyo interés por la cultura pop japonesa -y la reflexión sobre el uso de tecnologías que tiene el anime- hará un buen match con la reflexión que tiene sobre la tecnología, el pasado y los procesos musicales.

Sujeto + Tecnologías: la inevitabilidad de la prótesis

Hemos visto entonces que el uso de la tecnología (animación y música) invita al ser humano ha repensar nuestra relación con ella. Especialmente, en el ámbito musical ha permitido al sujeto ampliar la creación de sonidos y su experiencia frente a la música. De esta forma se cumple lo que señala José Ignacio López Ramírez Gastón en su libro La guardia vieja: visiones sobre la música electrónica en el Perú. En este explora la interdependencia que existe entre la tecnología y la música, y apunta la importancia de la aparición de máquinas de creación sonora como medio para ampliar nuestras limitaciones naturales y la experiencia musical.

Este mismo proceso nos invita a pensar la producción musical como obra de las tecnologías, donde tanto las nuevas tecnologías como la música electrónica fungen de prótesis del ser humano, los cuales le permitirán ampliar su experiencia musical y auditiva, y experimentar nuevas sensaciones. Estassegún Paul B. Preciado y Marshall McLuhan no deben ser únicamente entendidas como una sustitución artificial de alguna parte del cuerpo, sino también se incluye toda tecnología de uso que permite ampliar nuestros sentidos, como el teléfono, el televisor o las computadoras. Con ello se implica que todo cuerpo por sí mismo es “incompleto” y que requiere de una tecnología que le permita superar los límites físicos y de los sentidos.

Entonces, con todo el marco presentado procedemos a analizar el video musical (o corto animado, sin ponernos tan exquisitos con la terminología) Shelter.

¡Ahora sí! Shelter: Rin y el antropocentrismo

ADVERTENCIA
Si no has visto todavía el corto animado, te animamos a que lo hagas, porque a partir de ahora vamos a iniciar de lleno con el análisis (AKA spoiler alert)

Como recordarán en el artículo sobre Mononoke Hime, el sujeto en la sociedad occidental colonialista y capitalista es concebido como un cuerpo “completo”, es decir sano, sin enfermedades ni mutilaciones, el cual es productivo en sentido reproductivo y económico. Asimismo, se trata de un sujeto que se encuentra escindido de la esfera natural, con lo cual todo vínculo con ella es rechazado y considerada como “irracional”. Tenemos, entonces una sociedad occidental con una perspectiva antropocéntrica, donde el ser humano es concebido como la medida y centro de todas las cosas.

Bajo esta misma lógica todo vínculo que se pueda establecer entre el sujeto y la tecnología también será rechazado. Esto provoca dos tendencias: por un lado se percibe el avance de la tecnología y su inserción en la vida cotidiana con miedo, ya que se considera es motivo de alienación del ser humano y provocará su desplazamiento (cual narrativa de ciencia ficción o postapocalíptica); y por otro coloca en primer plano la “imperfección” del cuerpo, asemejándolo a aquellos discapacitados o mutilados, lo que la sociedad ha calificado bajo la etiqueta de “abyecto”. Asimismo, se concibe un riesgo de la tecnología como fuente de escape y aislamiento.

En ese sentido, los primeros minutos del corto animado nos presentan a Rin como un sujeto que puede ser identificado como un ser humano “completo”, es decir, sin enfermedades ni mutilaciones:

Rin como cuerpo «completo» pero que depende de la tecnología (tableta). Shelter de Porter Robinson y A1-Pictures

Si bien se trata de un cuerpo “no productivo”, ya que la mayor parte del tiempo yace entre las paredes de su habitación -haciendo uso de su tableta para crear objetos y paisajes-, no es distinto al ser humano concebido desde el antropocentrismo. Esto debido a que se trata de un sujeto desconectado de su entorno, el cual construye, reconstruye y modifica este a su antojo con el único fin de adaptarlo a sus necesidad y que le ayude a escapar de su soledad. En otras palabras, el entorno que crea Rin gracias a su tableta y la realidad virtual tiene por finalidad satisfacer sus necesidades. Pero este colonialismo sobre la naturaleza no será perfecto porque hay algunos elementos que Rin no podrá controlar, como los cambios de clima y la aparición (cual glitches o bugs) de algunos objetos:

Rin frente a un columpio que no programó con su tablet. Estos bugs demuestran una falta de control absoluto hacia la realidad virtual (equivalente al territorio) por parte del sujeto. Shelter de Porter Robinson y A1-Pictures

Por lo tanto, en los primeros minutos del corto animado se puede identificar a una protagonista que pone en cuestión la aproximación occidental que tiene el ser humano con el territorio, ya que pese a ser un cuerpo con capacidad productiva, está aislado de su entorno y no tiene plena facultad para controlarlo. Asimismo, se puede apreciar un uso incorrecto de la tecnología y la realidad virtual por parte de Rin, ya que inicialmente serán un medio de escape y aislamiento.

Shelter, prótesis y tecnologías

Sin embargo, si profundizamos en el uso que se le da a las tecnologías, podemos identificarlas como una prótesis.  La realidad virtual, según su creador Jaron Lanier, tiene el potencial de ser una prótesis ya que una vez el usuario sale de esta, ayudaría a percibir lo que lo rodea de forma más nítida y vívida. Asimismo, el autor rescata que esta debería ayudar al ser humano a ser más creativo, expresivo y empático. En el caso del corto animado, al tratarse de una narrativa postapocalíptica -donde Rin no tiene contacto alguno con otros seres humanos ni con la Tierra debido a la destrucción de esta-, la realidad virtual suplirá tanto las relaciones humanas, como el territorio o la naturaleza. De esta forma, las tecnologías fungirán para Rin como una prótesis de los sentidos y la experiencia.

La realidad virtual como «prótesis» de la naturaleza y una exploración de los sentidos para Rin. Shelter de Porter Robinson y A1-Pictures

Podemos apreciar, además, una resignificación del cuerpo según la lógica antropocéntrica, ya que el cuerpo “completo” de Rin requerirá de una nave espacial, es decir, una tecnología o prótesis, para sobrevivir en el espacio. Esta nave inventada por su padre demuestra la profunda interdependencia o interconexión que hay entre el ser humano y la tecnología, pues la máquina no cumpliría su objetivo sin el ser humano ni este puede sobrevivir sin el uso de estas. Con ello, el video está en contra de la noción de que la máquina va a desplazar al ser humano y, por el contrario, la inserción de las tecnologías a la vida se trata de un proceso inevitable e irreversible para la supervivencia humana. Por lo tanto, la tecnología se trata de una prótesis del cuerpo:

La interconexión (inevitable) entre el cuerpo y la máquina para sobrevivir. Shelter de Porter Robinson y A1-Pictures

También es interesante cómo la tecnología (nave espacial y realidad virtual) funge de prótesis de la memoria de Rin y del padre. Por un lado, la realidad virtual es una prótesis de la memoria de Rin ya que esta, cuando se sale del control y presenta bugs, se asemeja a los recuerdos reprimidos de Rin, y la obliga a confrontarse con su pasado:

Recuerdos reprimidos por parte de Rin. El enfrentarse a ellas le permitirá reconectarse con su pasado. Shelter de Porter Robinson y A1-Pictures

Por otro lado, la nave espacial es una prótesis de la memoria del padre, ya que en esta se guardan los recuerdos de este: desde su preocupación por proteger y cuidar de su hija en los últimos días que le quedan a la Tierra, hasta el proceso de construcción de la máquina que le permitirá a Rin sobrevivir en el espacio. De esta forma, la nave será una prolongación de las memorias del padre, y un nuevo refugio que servirá de “hogar”.

Por último, el final del corto animado refuerza la idea de que es en el mismo cuerpo y mente de la protagonista donde se almacena la memoria de su padre: si no fuese por sus recuerdos, no habría podido liberar las memorias del padre, las cuales yacían almacenadas en la misma nave espacial. Con ello, la tecnología deja de ser aquel elemento expulsado de la esfera humana, y el que provoca la separación entre los mismos sujetos; por el contrario, ayuda a restablecer una (re)conexión entre Rin (sujeto), el padre (las otras personas) y la tecnología (que en la realidad virtual cumple también un equivalente a la naturaleza).

En conclusión, el video musical Shelter es producto de la reflexión inherente sobre el uso de tecnologías en la animación japonesa y en el proceso de producción de la música electrónica. Gracias a ello el espectador tiene un producto que lo invita a (re)pensar cómo nos aproximamos hoy en día a la tecnología: su uso y desarrollo es parte de un proceso inevitable e irreversible, y tiene el potencial de conectar a los seres humanos (todo esto, quizás, elementos que resonarán con nosotros después del coronavirus…).

La propuesta de Shelter: una interconexión entre Rin, su padre y la tecnología. Una visión esperanzadora, pero no por ello menos postapocalíptica. Shelter de Porter Robinson y A1-Pictures

[EXTRA] Entre lo apocalíptico y lo lúdico: la “estética del error”

Una reflexión final. En el proceso de lectura e investigación para la redacción del trabajo (2017-2018) sobre el que se basa el presente artículo había surgido un discurso que defendía el “regreso a lo natural”. Asimismo, se había identificado que algunos autores teóricos consultados temían que la sociedad colocara las tecnologías por encima del ser humano, ya que este exceso de confianza en la tecnología empobrecería al sujeto y lo “deshumanizaría”. Frente a esta tendencia, ya desde hace un tiempo algunos artistas fueron conscientes de la posibilidad del error y fallo inherentes al uso de las tecnologías y la incorporaron en sus productos. En otras palabras, le dieron un fin lúdico. Ejemplo de ello lo podemos ver en el glitch art.  

Glitch art, vía HiSoUR

Algunos videos de música electrónica en la última década han incorporado dicha estética (2). Shelter es un ejemplo a nivel narrativo, ya que los bugs y glitches en la realidad virtual son lo que permiten el crecimiento de la protagonista, quien recuerda su pasado, y con ello se reconecta con su padre y la tecnología. La misma estética podemos identificar en otro videomusical de Porter Robinison: Flicker, donde el glitch art es una herramienta que permite al espectador percibir las imágenes desde una óptica nueva -creativa- y potenciar algunos elementos que existen en la realidad. Finalmente, tampoco sería descabellado identificar estéticas como el vaporwave -con álbumes como Floral Shoppe de Macintosh Plus- como cercanas a esta forma artística. Esto debido a que su estética rompe con el sentido lineal de tiempo, y yuxtapone elementos que no pertenecen a una misma era: el arte grecolatino con la estética de los años 80’s; una nostalgia y estética de la ciudad que supone un “error” en la lógica lineal del tiempo. Frente a todo ello, ¿a dónde nos llevará esta aproximación -más confiada, pero no por ello menos cuidadosa- que tenemos a la tecnología?


Glitches a más no poder en Flicker de Porter Robinson

El «error», lo «atemporal» y «alocal» en la estética vaporwave

NOTAS

(1) Sobre la crítica a la música electrónica, leer You are not a Gadget de Jaron Lanier, creador de la realidad virtual.

(2) Y si consideramos que los videos musicales apelan al pensamiento y la mirada de una generación, ¿será acaso que los nacidos a finales de la generación millennial y los de la generación Z son conscientes de la posibilidad de error en las tecnologías, y por ello no las perciben de manera fatalista como las generaciones anteriores?

¿Te gustan las tecnologías y la música electrónica? Te recomendamos…

Holmes, Thom. 2008. Electronic and experimental music. 3ra edición. Nueva York: Routledge.

Lamarre, Thomas. 2009. The Anime Machine. A Media Theory of Animation. Mineápolis: University of Minnesota Press.  

Lanier, Jaron. 2010. You are not a Gadget. A Manifesto. Nueva York: Alfred A. Knopf.

Lanier, Jaron. 2017. Dawn of the Everything: Encounters with Reality and Virtual Reality. Nueva York: Henry Holt and Company.

López Ramírez-Gastón, José Ignacio. 2019. La Guardia Nueva: Visiones sobre la música electrónica en el Perú. Lima: IDE-PUCP.

Mayorá Román, Eduardo. 2015. “Pop atmosférico. Sobre Marshall McLuhan y la estética contemporánea”. La Trama de la Comunicación. 19, 331-345.

McLuhan, Marshall. 2002. Understanding Media. The Extensions of Man. Nueva York: Routledge. 

Preciado, Paul B. 2011. Manifiesto contrasexual. Barcelona: Editorial Anagrama.

Sobre el estilo de Adventure, de Madeon

Evolución del “complextro”

https://recordingarts.com/record/evolution-of-house-music/complextro

Sobre el glitch art

http://www.ccapitalia.net/reso/articulos/cascone/estetica_del_error.pdf

http://www.ubicuostudio.com/es/filosofia-del-software-es/la-estetica-del-glitch/

https://elpais.com/diario/2005/02/24/ciberpais/1109214144_850215.html

El presente trabajo es una ampliación y adaptación de

Arana Blas, María Alexandra. 2018. “Prótesis e Interconexión: un análisis del video musical Shelter de Porter Robinson” Ponencia presentada en el Congreso Internacional ALADAA 2018. Lima. (Documento enviado a las Actas de Congreso ALADAA 2018)

Alexandra Arana Blas

Tusán. Literata e investigadora. Ama el anime, el manga, los cómics y los videojuegos tanto como la teoría. Considera la cultura popular como fuente de reflexión y de aprendizaje.

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